Alejandro Amenábar (Tesis, 1996) logró una obra maestra llena de atmósferas en la que, con la precisión de quien sabe cómo contar una historia, nos ofrece una visión meticulosa y estudiada donde el suspenso es constante y los temores que todos hemos tenido (la oscuridad, los ruidos en la noche, la posibilidad de que exista un "algo" tenebroso más allá de lo que podemos -queremos- creer) salen a flote y nos obligan a brincar en nuestro asiento, a maravillarnos, a reír nerviosamente, a sorprendernos, sudar frío y destilar adrenalina, pero -sobre todo- a disfrutar de una gran, gran cinta.

Amenábar, como es usual, escribió el guión y la música de la película, con lo que como director tenía toda la perspectiva de lo que quería lograr, y el resultado es una pieza delicada, detallada y magistralmente tejida, donde la luz y oscuridad, las actuaciones, los personajes, el movimiento y posición de la cámara y las notas y acordes de los instrumentos se combinan para generar una historia de suspenso que será recordada y marcará pautas en el género.

El control del director es absoluto: cada juego de luces y sombras, cada serie de ruidos y de silencios, y cada detalle de la historia que se nos presenta, tiene un objetivo claro en lo que quiere que sepamos, creamos y sintamos: la tensión es creciente, con pausas adecuadas y correctamente establecidas, y la preparación para lo que veremos está increíblemente lograda.

Nicole Kidman, ofrece un rol que será recordado y alabado por muchos, en general los personajes apoyan las ideas que Amenábar quiere mostrar, de modo que el resultado es una grata experiencia total... Una obra maestra.

15 MINUTES

Dirección: John Herzfeld, 2001
Guión: John Herzfeld 
Fotografía: Jean Yves Escoffier
Música: Anthony Marinelli y J. Peter Robinson 
Reparto: Robert De Niro, Edward Burns, Karel Roden, Oleg Taktarov

Nunca antes en la historia han estado combinadas la fama y la ley de tan cerca, y de forma tan peligrosa. 
Con la insaciable demanda de hoy por las noticias de alto calibre en la televisión, todos desde criminales, policías, abogados y hasta los políticos quieren encabezar la lista de las celebridades. ¿Hasta donde va a llegar la gente más desesperada de la sociedad para conseguir sus "quince minutos"? Y ¿que tan dispuesto esta el publico para mirarlo? Estas preguntas formula el director y guionista John Herzfeld en su nuevo film.
Ocurre un doble asesinato en New York City que debe ser solucionado. Pero la historia rápidamente establecida no se basa en averiguar la verdad sobre el asesinato, sino quien controla la verdad. Este film muestra que el medio de comunicación busca una imagen chocante cueste lo que cueste. En 15 minutos, tal como los policías persiguen a los asesinos, los medios persiguen a los policías y todo se convierte en una tormenta de fuego. Roberto De Niro se muestra como el detective "superestrella" del homicidio Eddie Flemming, el que sabe manejar homicidas del alto-perfil. Pero ahora, con un crimen que ha terminado en un fuego espantoso, Flemming debe unirse con a Jordy Warsaw (Edward Burns).

¿Cómo nos sentimos ante una cultura que demuestra un, aparentemente, insaciable apetito por la desgracia, la tragedia y los crímenes horrendos?. ¿Cuál es, finalmente, el precio que acabamos pagando por todo ello?
Del galardonado director de Don King: only in America y Two Days in the Valley nos llega este thriller de acción entrelazada con humor negro y una cierta crítica social acerca de la insustancialidad de la fama en nuestros tiempos.

En una época en la cual casi cualquiera puede ser famoso durante 15 minutos, ¿qué valor tiene la fama?, ¿cuán lejos puede llegar a ir la gente para conseguirla y cual es su recompensa?. Cuando el vídeo y la televisión en directo nos da asientos de primera fila para casi cualquier acontecimiento, ¿qué podemos (o debemos) mostrar?.